Carta
Hoy se me ocurrió pensarte, estoy a punto de volver a verte. En mi vida hay un nuevo amor, que por más barreras que trato de poner, la confianza en esta oportunidad derriba mis prejuicios.
No sé qué pensar respecto a ti, por eso te traigo a mi recuerdo. Espero que tengas en cuenta la última gran grosería que me hiciste y que las razones por las que volvemos a charlar, son distintas a las que acostumbrábamos. Claro que ahí está escondido el gran pretexto: volver a verte.
He pensado en contarte de él, esta linda persona. Realmente describirlo a los demás se ha limitado a decir cosas agradables de él para expresar que me agrada. provocado quererlo, sentir de nuevo eso, sin ningún esfuerzo.
Parece de fantasía, vamos en la misma línea, no se si sea la misma dirección. El gran defecto que me encanta de él es que es vegetariano. La situación se ha visto muy apresurada, por eso dudo y por mucho más… creo que vuelvo a apostar por todos estos sentimientos, como contigo, pero ahora es correspondido. Quiero creer.
Tengo que decirte que sí espero verte y quiero abrazarte, esta vez ya no te diré que te extraño, aunque así sea, esta vez no me tocará besarte aunque las posibilidades existan, esta vez trataré de no verte con ternura y amor, aunque no negaré que se me escape una que otra mirada, esta vez no te hablaré de mis problemas existenciales, aunque tú me platiques los tuyos, esta vez no cederé a ti, porque el deseo de querer estar contigo se ha acabado. Al final de esos días volveremos a ser tan distantes como la distancia nos lo manda, mi cariño hacia ti aterriza en la realidad, no pienso volver a hacerme daño.
¿Sabes?, en nuestros planes me pregunto: ¿nos soportaremos tanto tiempo en carretera?, ¿qué música escucharemos?, ¿habrá silencios incómodos?, ¿preguntas tontas para entretenernos en el viaje?, ¿debo estar advertida de alguna discusión?. Antes de generar ideas, procuro decirme: en unos días lo sabré.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario